Cómo hacerse hombre sin tener padre

Joven, lo entiendo: crecer sin un padre deja un vacío. Yo mismo lo viví, criado en un hogar donde el marido de mi madre no era un mentor, sólo un compañero de casa. Sin embargo, aquí estoy, casado desde hace cuatro décadas, dirigiendo FivestarMan, un movimiento a favor de la virilidad auténtica. Por supuesto, queremos un padre, pero aún puedes convertirte en un hombre; necesitarás propósito, fe y agallas. La Biblia dice, «Los propósitos del corazón del hombre son aguas profundas, el hombre entendido las saca» (Proverbios 20:5). He aquí cinco formas de aprovechar esa reserva y ascender como hombre -aventurero, emprendedor, galante, fiel y filántropo- sin la guía de un padre.

1. Cómo llegar a ser un hombre sin padre: Abraza la aventura

Dios puso en ti un espíritu salvaje, una llamada al campo: piensa en David lanzando piedras en el prado (1 Samuel 17:34-37). No te escondas en tu habitación con videojuegos; sal y ensúciate. Lucha, practica senderismo, pesca… pon a prueba tus límites. Yo encontré mi límite a los 12 años, luchando con los retos de la vida como Jacob luchó con Dios (Génesis 32:24). Las pérdidas escuecen, pero te afilan. «Como el hierro afila el hierro, así un hombre afila a otro» (Proverbios 27:17). Entra en la contienda; es donde comienza la hombría. No permitas que la inseguridad te impida practicar deportes. Prueba otros diferentes y comprueba si te sirven. Te recomiendo encarecidamente que aprendas defensa personal: lucha libre, Krav Maga, Jiu-Jitsu brasileño, Muay Thai o Taekwondo.

2. Cómo llegar a ser un hombre sin padre: Persigue el Aumento

Estás hecho a imagen de Dios, diseñado para ser fructífero (Génesis 1:28). No te conformes con limosnas: persigue tu vocación. Abraham abandonó su hogar sin nada más que fe y se enriqueció con tierras y ganado (Génesis 13:2). Empieza poco a poco: corta el césped, lee sobre el dinero y ahorra un dólar. Jesús alabó al siervo que duplicó sus talentos, no al que los enterró (Mateo 25:14-30). Tu afán no es sólo para ti, sino para financiar tu propósito. Investiga ese fuego empresarial. Aprende a invertir pronto.

3. Cómo llegar a ser un hombre sin padre: Mantente Gallardo

Un hombre de verdad honra a las mujeres -madres, hermanas, compañeras- con dignidad. «Maridos, amad a vuestras mujeres, como Cristo amó a la Iglesia» (Efesios 5:25) empieza por cómo las tratas ahora. Abre las puertas, habla con amabilidad, guarda tus ojos de la lujuria (Proverbios 7:13). Aprendí esto sin el ejemplo de un padre, impulsado por el deseo de ser el hombre que mi madre merecía. La pureza es un reto en este mundo, pero la sabiduría de Salomón (Proverbios 7) puede guiarte. Sé el héroe, no el cobarde.

4. Cómo llegar a ser un hombre sin padre: Forja un Carácter Fiel

La integridad triunfa sobre el talento. «El hombre íntegro camina seguro» (Proverbios 10:9). A los 12 años, oí a Dios susurrar mi futuro, una voz más clara que la de cualquier padre. Camina con Él a diario: Adán lo hizo en el Edén (Génesis 3:8), Noé lo hizo en medio del caos (Génesis 6:9). Lee Proverbios a diario; sus 31 capítulos construyeron mi columna vertebral. Mantén tu palabra, reconoce tus errores y perdona rápidamente (Mateo 6:12). La aprobación de tu Padre Celestial llena el vacío que ningún hombre puede llenar. Apóyate en ella. Por cierto, suscríbete a ElCampeónDiario.com – recibirás una palabra de aliento cada día del año.

5. Cómo llegar a ser un hombre sin padre: Lucha por una Causa

Estás programado para la trascendencia, no sólo para la supervivencia. «Dios ha puesto la eternidad en el corazón de los hombres» (Eclesiastés 3:11). Encuentra una necesidad -ayuda a un niño, arregla el porche de una viuda- y atiéndela. Pedro y Juan, tipos corrientes, sacudieron el mundo porque habían estado con Jesús (Hechos 4:13). Mi causa quedó clara tras el lamento de un moribundo: «Vive mientras vivas». No te entretengas; lucha por algo más grande. Tu legado no está en lo que obtienes, sino en lo que das. No luches por el éxito; déjate llevar por la trascendencia.

Conclusión

Yo he estado donde tú estás: sin padre, buscando. Pero Dios intervino, luchando conmigo en el aislamiento, hablando de propósito a mi alma. El Salmo 68:5 declara, «Un padre para los huérfanos… es Dios». Tienes un Padre que nunca te abandona, guiándote para sacar al hombre que llevas dentro. Da un paso adelante, joven. La aventura, el aumento, el honor, el carácter y la causa son tuyos para reclamarlos. No permitas que el victimismo se convierta en tu identidad. Reclama una victoria para convertirte en un hombre.

Acción

Para acompañar el libro Hombre de cinco estrellashemos creado el Reto de 45 díasdiseñado específicamente para ayudarte a comprender los propósitos de Proverbios 20:5. Acepta el Reto y comprenderás la intención original de Dios para tu vida.